UBIA ÜAI JÄ (UBIA ESPÍRITU DE ROCA). ESTEBAN BINNS CARPINTERO | AJKÖ KI No 2

UBIA ÜAI JÄ (UBIA ESPÍRITU DE ROCA). ESTEBAN BINNS CARPINTERO | AJKÖ KI No 2

 

 

CONTIGO ADONDE QUIERAS

A Yanel Venado Jiménez

 

Conmigo podrás ir

hasta el vientre de la noche oscurísima

Porque eres mi amor.

Porque puedes dormir desnuda ante mis ojos

Y ante todo lo que mira sobre el cielo y 

Con el brillo de los cocuyos y del lunar de tu frente.

Mis manos solo serán ternura sobre tu cuerpo

Hasta hacerte agua para la tierra

Y la tierra bebería tu sal humedecida

Y tus ojos abiertos me mirarían a mí

Y al cielo mirón como si la media luna fuera su sonrisa.

Aunque yo nací entre serpientes

Y dejé sin colmillos al Jaguar

Porque nací saltando

En la fiesta del krün, la fiesta ancestral de nuestro pueblo.

Con mi nombre de Guerrero

Espíritu de roca, simiente de los afluentes

Te quiero debidamente

Porque contigo

No tengo miedo.

 Tú no tendrás miedo

Pues podemos conquistar

Las tierras del agua de Ño kribo-las fuentes del río grande-

Las tierras del este y del oeste

Y hacerte una casa de corales en punto Sur

Y debajo de un Naranjo

dominar la danza del tuglo-la danza del ombligo-

tú, el brazo fuerte

corazón consejero, tú

mi amor hasta la muerte.

 


 

MUSA

 

Puedo pasar la noche sintiendo

tanto resquebrajo y tanto amor al mismo tiempo.

Puedo pasar la noche sintiendo redivivo

buscando el aquelarre donde estás

bruja bendita, flor de caracuchas

humano dominio del amor y del dolor,

bienaventuranza de los templos de mi casa-mis caminos-

Puedo seguir sintiendo esta noche

si te llevo adonde viven todas las familias de Elvira chionura

sentir que dormimos de tanta brujería del aroma a caracuchas

y del jugo azucarado de esmeraldas coliblancas

cuando tú y yo sólo necesitamos las voces selváticas

el canto del bin bin, el susurro de la patria

el vuelo del quetzal buscando eternidad.

Puedo pasar la noche sintiendo

rompiendo la costumbre

de donde un día no supe que el amor existía

más allá de la comarca.

 

Así me encuentro, tratando de dominar los desaciertos

y la pena que me trae la canción de la radio.

Sí, me pongo triste y no hay resistencia

que aguante la memoria deshojando cada cosa que plantamos:

los árboles y las banderitas en la Zona del Canal cada 9 de enero.

Cosas como la risa ante un montón de presencias

y los versos que intentamos, sentados frente a la Presidencia

mirando la blancura de la Luna

y la forma de la bandera sobre el Cerro Ancón-allá con doña Amelia-

Los turistas van caminando, cavilando por el Casco Antiguo

sin darse cuenta que hay una tristeza atravesando a alguien

sin enterarse de la alegría que se posa en las alas de los pelícanos

adormilados en la Plaza de Francia-al lado de la placa del general Lorenzo-

tal que ni la antigua abuela del cielo oscuro

mostrando la catedral-ni la catedral- pueden medir el desahogo

que se va a ambos mares por debajo de los barcos que pasan a la distancia

ni de aquello que une a otros bajo la mano mística de la noche

en este universo que no me deja acabar tus pedazos que me quedan.

 

Hoy aquí

Frente al incesante mar

Dejo los escombros de la musa

Esa que derramó su espíritu en la raíz de los cactus.

 

Aquí dejaré

mi espíritu muerto

en este muro horizontal de arena salada.

Aquí, con cada ola

te chupará la orilla

hasta hacerte celeste.

Yo no sé si eres Eva, yo no sé si eres Lilith-solo te sé, desobediente-

En los vientos australes tú serías la música inca

curvatura de los dioses, miel de las alturas.

En los vientos boreales te pensaríamos bella, la musa maya,

semilla indómita que cubre la extensa cordillera

de Tenochtitlan, la guerrera, la mujer medicina.

Las musas de mi casa llamaron hermana

a la hija de Bayano, abeja musa

tamborera perfecta, cuscú maravilloso

sensación desconocida, musa de musas, mi musa.

Musa, este mar que alcanza mis confines

tiene tus letras incrustadas

por los caminos donde saltan las ballenas jorobadas

en el Golfo de Chiriquí.

Aquí callaron las cigarras para oírme recitar

con valor al mar, hablándole de las gándaras

sedientas que cubren la comarca

mondándole cumplidos

diciendo más o menos:

Tú conoces a Polimnia, a Erato y a Calíope–y conoces a mi musa-

¡Oh casa de las algas y sus bosques!

Tú has visto sus nalgas agitadas por el gozo de su sangre

madre de volcanes hundidos

tú has visto su cintura acurrucando los repiques de sus cánticos

y en alegorías de ella has levantado una grandiosa hija.

Madre desesperada por el hombre-que nació de tu ombligo-

torda tu bravura

mansa inmensa, del huracán desahogo

¡oh abuela del agua, querubín de la Luna!

somos felices contigo

nosotros los amantes, los novios, los escapados y enamorados

somos felices contigo

nosotros los tristes-somos felices contigo-

porque tú nos recuerdas al amor y nos traes el olvido.

 


 

QUÉDATE CONMIGO AMOR

 

Mira la luna conmigo

quédate a mi lado con esa contemplación

de sus trazos sobre lo oscuro.

Mira las aguas caer sobre la meseta del Chorcha

y hazlo conmigo.

Quédate hablándole a mi sombra y a mi alma

hablándole con tus manos y con la calma de tu boca

al ser que te llama de hado.

Dame luz, dame noches

las noches más hermosas.

Dame tu cuerpo sobre el río

y tu ser sobre las piedras consteladas

denominando las cosas eternas

esas que se quedan en la sonrisa.

Dame vida, la vida de tus ojos

para que saquen con su brillo

lo carcomido de pasado.

Porque serán sus ojos

mi locura, mi emoción más profunda

la razón de felices desvelos

la fuerza sobre mi fuerza.

Amor, sé lo que quieras

y aún con todo eso, sé feliz conmigo.

 

 

TÚ EN ESTADO SALVAJE

 

Tú en estado salvaje

serías ungida diosa del mar

por la voz de nuestro Run Kira

anciano antiguo, viejo ancestro.

Tú en estado salvaje serías ruda

y amorosa

y hubieses impedido la sangre

de las doncellas

que bebió el brujo Tain Bega.

Tú, amor del agua

amor que luce la nagua, vestida de mi nación

de  dulce canción, de lindos ojos

de caminos agrestes, de fuerza espiral,

maestra de los ritos de mi pueblo.

Tú en estado salvaje

tendrías el color de la vida sobre tu frente.

Tú serías el elogio de la selva nublada

llevarías los jarrones de barro

llenos de vino y agua fresca para tu simiente.

Tú en estado salvaje cuidarías a mi espíritu protector

la garra, huella, las manchas

el rugido y las flores que tocan sus bigotes.

Sin embargo, comprendo así

tú en el estado en que estás ahora

eres perfecta para el tiempo

y exacta para el corazón que te necesita siempre

es decir, el mío.

 


 

RECETA PARA UNA CASA LIBRE

 

Tengo varias cosas que hacer para olvidar

empiezo por pintar la casa

brochazos y cantos de pájaros que a veces uno ignora.

Con acompañamiento instrumental

sigo por ordenar mi cuarto

borrando colores y risas y alaridos

y el nombre

que ya no pronunciaré con amor sobre mi cama.

Continúo con un jardín de lirios que tenía pendiente.

Pintaré algunos cuadros en acrílico

andaré descalzo para dejar mi propia huella

y quitar las pisadas de zapatos viejos

porque es el único camino posible

donde cogeré fuerzas hablándole a los sapos

en las mañanas aún a oscuras.

Sacaré poemas de sus voces

y el mirlo y el ruiseñor y las caracuchas de la vereda

hablarán en mi conciencia

y yo seré finalmente

una persona libre, en un camino libre, en alguna tarde libre

que espera amar en una casa libre.

 


 

Ubia Üai Jä (Ubia Espíritu de Roca). Esteban Binns Carpintero: profesor de matemática, editor audiovisual, de la Comarca Ngäbe-Buglé.  Seleccionado para la Antología poética "El mar que nos unió" libro del proyecto PoetiCA por la integración centroamericana, Festival de poesía Ars Amandi Panamá 2013-2014.  Invitado para la Antología de poetas kunas, 2015. Poeta invitado en la Antología "Poetas emergentes de Panamá", editorial La Antigua, 2017. Poeta invitado en la Antología "Cantos de Abya Yala", 2017. Autor del libro " Ode"-cuentos de nosotros- escrito en español y ngäbere, Ediciones Pelo Malo, 2018. Autor de la obra "El poema de los adioses" premio de poesía León A. Soto 2017 Publicado por la Alcaldía de Panamá en la antología Poesía panameña reunida, 2018. Autor de la obra "Como si la vida fuera una sola noche" publicada por Amargord Ediciones", 2018.

 

CURADURÍA: Yordan Arroyo (Costa Rica)